Mujeres harán plantón mañana en Olímpica Stereo para pedir el cierre del programa de Jeiminson Ochoa
Las organizaciones de las mujeres en el Atlántico anuncian la realización de un plantón frente a la sede de la Organización Radial Olímpica en la calle 72 con carrera 48 donde esta ubicada la emisora Olímpica Stereo para pedir el cierre del programa “Sábado de vacilón” donde el locutor Jeiminson Ochoa, “denigró” de las mujeres.
Hay quienes dicen que este locutor, siempre se expresa mal de las mujeres y sus mensajes en doble sentido en vez de poner en alto el nombre de la emisora, irrespeta a los oyentes y a la comunidad en general, debido que no tiene en cuenta que esa estación radical de corte popular, es escuchada no sólo por adultos, sino por niños, jóvenes y también mujeres.
En el comunicado orientado por la abogada y líder de las organizaciones de mujeres, Emma Doris López, afirma que con estos mensajes se fomenta la violencia contra la mujer.
El siguiente es el texto del comunicado:
Las organizaciones de mujeres del Atlántico hemos alzado nuestra voz de protesta por los comentarios sexistasde Jeminson Ochoa, locutor de la emisora Olímpica Stereo, al referirse a un video que circula en las redes sociales sobre un ataque violento de un hombre hacia una mujer por aparente infidelidad, sucedido en el centro de Barranquilla.
La violencia contra las mujeres es uno de los delitos que más se ha incrementado en los últimos meses, especialmente por el confinamiento obligatorio debido a la pandemia de Covid-19. Es un flagelo por el que valerosas mujeres trabajan desde varios frentes, y desde hace muchos años, para acabarlo y masificar los derechos del género femenino, dando a conocer las leyes que amparan a la mujer, para que sepan que no existe ningún motivo válido por el que ellas deban permitir que atenten contra su integridad física y mental, y mucho menos para que se queden calladas.
Tan difícil e insegura es la situación de las mujeres en nuestro país que en 2008 fue aprobada y sancionada la Ley 1257, mediante la cual se definen lineamientos para la adopción de normas que permitan garantizar a todas las mujeres una vida libre de violencia, tanto en el ámbito público como en el privado.
Por ello, aunque para algunos, las palabras denigrantes del locutor puedan representar la idiosincrasia del machismo costeño, lo cierto es que ese tipo de lenguaje va directo a la psiquis del agresor quien puede creerse en libertad de atentar contra su compañera y, por supuesto, afecta el incansable trabajo que en las organizaciones de mujeres venimos realizando, precisamente, para decirle ¡Basta ya! a la violencia contra las mujeres.
Es inadmisible que esos micrófonos radiales sean administrados por personas que no evidencian respeto por su profesión y mucho menos por las mujeres, pues si el locutor, que tiene madre, y seguramente hermanas, tías, primas, novia o esposa, estuviera mínimamente informado sobre el real acontecer de la violencia contra las mujeres y las leyes que las protegen, seguramente no atropellaría la dignidad del género femenino.
Sería importante que tanto el señor Jeminson como tantos otros locutores que se creen unos reyezuelos del lenguaje chabacán, tuvieran presente que por violencia contra la mujer se entiende cualquier acción u omisión que le cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual, psicológico, económico o patrimonial por su condición de mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, bien sea que se presente en el ámbito público o en el privado.
Uno de los sagrados objetivos de los medios de comunicación es educar y aportar a la construcción de sociedad. Sin embargo, cuando el manejo de los micrófonos está frente a este tipo de personas, la posibilidad de alcanzar ese objetivo se aleja cada vez más.
Desde las diferentes expresiones de organizaciones de mujeres estamos dispuestas a brindar la asesoría necesaria a los locutores del Atlántico para que desde sus micrófonos, puedan entregar un verdadero aporte a la construcción de una sociedad libre de violencia contra las mujeres.