Alternativa Caribe: Odio, populismo y oportunismo constante de la presidencial

Por JAVIER DE LA HOZ LUNA Director Alternativacaribe.info
Colombia votó por un cambio, escogió dos opciones. Pero, ¿cuál encarna el querer del pueblo?. Muchas hipótesis, conjeturas y cábalas cargadas de odio, populismo y oportunismo es la constante de esta campaña presidencial para elegir a quien asuma la primera magistratura el próximo 7 de agosto de 2022.
Esta campaña adolece de propuestas concretas, coherentes dirigida a mejorar la calidad de vida de los colombianos y le permita al elector tomar la decisión más conveniente para recomponer a Colombia, hoy sumida en la desigualdad social, con alto grado de corrupción en el manejo administrativo, afectando la estabilidad económica y poniendo en riesgo la inversión de capital extranjero y nacional en proyectos empresariales que permitan erradicar el desempleo, cerrando la brecha social, que cada día es mayor.
En medio de la polarización del país, producto de la hermenéutica de la política, los candidatos tratan de ganar nuevas adhesiones que les permita llegar a la Casa de Nariño con una votación representativa. Pero contrario al querer de Gustavo Petro y Rodolfo Hernández, los dos candidatos en contienda, crece la incertidumbre en el elector primario.
Ese elector primario, es el que al final tiene en sus manos la opción de definir el futuro de Colombia, si continúa la democracia o por el contrario ensayamos con un nuevo modelo de gobierno. Pero que atemoriza a muchos y este sería el obstáculo que encontró el Pacto Democrático para elegir a Gustavo Petro en primera y que los mantiene desesperados, por ponerles palos en la rueda del fenómeno político que representan el ingeniero Rodolfo Hernández, polémico ex alcalde de Bucaramanga que se ha caracterizado por ser un populista empedernido.
Sin embargo, hoy, la clase política del país le ha dado el respaldo, al considerar que representa el verdadero cambio. Tanto es así que los partidos tradicionales, como organizaciones políticas, no le han dado el apoyo directo, dejado en libertad a sus miembros para que escojan la mejor alternativa de cambio que garantice la democracia, un manejo transparente y no excluyente en eventual gobierno.
Con Dios y con el diablo
En medio de la campaña proselitista, en marcada por vientos de cambio, los actores políticos buscan a toda costa montarse en el bus de la victoria. Hay de todas las estirpes, coherentes con su pensamiento, alineados con una opción pierdan o ganen; pero hay unos que quieren estar con Dios y con el Diablo.
Si, hay quienes quieren colarse en los dos equipos para ganar o ganar el próximo 19 de junio cuando los colombianos escojan al mejor para que oriente los destinos de la nación por los próximo cuatrienio.
El caso específico es el relacionado con la coalición de Centro Esperanza, que tuvo como candidatos a Sergio Fajardo a la Presidencia y Luis Guillermo Mejía, a la vicepresidencia. Mejía no esperó tomar aire, para llegar a la campaña de Gustavo Petro, como miembro de las negritudes apoyando al máximo líder de la izquierda en Colombia y a su fórmula vicepresidencial Francia Márquez.
Ahí no paso nada, Mejía fue bien recibido y de inmediato permitió que varios miembros del Partido Verde, al quedar en libertad se sumaran a la campaña del Pacto Democrático. El revés de Centro Esperanza se dio este fin de semana, luego que Sergio Fajardo en compañía de Juan Fernando Cristo, Jorge Robledo y Carlos Maya llegaron a donde el ingeniero Rodolfo Hernández, con propuestas non sancta, que fueron rechazadas y sirvieron para que allí le cerraran las puertas.
Con este accionar quedó evidenciado el oportunismos por parte de quienes representan el Centro Esperanza, dejando mal parado a Fajardo, quien siempre mostró ser un candidatos ecuánime, coherente con su pensamiento y la realidad del país, quien en esta campaña se vino a menos no solo por los resultados de la primera vuelta, sino por la forma como quiere infiltrarse en las dos alternativas de cambio, para buscar mantener vida en la arena política.
Esperemos que en lo que resta de campaña se de una reingeniería al interior de las campañas que surjan propuestas concretas, se depongan los odios, baje el grado de populismo y desaparezcan los oportunistas. Necesitamos elegir a conciencia para no mantener un arrepentimiento por los próximos cuatro años.
javierdelahozluna@gmail.com