SANTA LUCIA: UN PUEBLO CON  MEMORIA

*Nosotros también tenemos héroes.

Por Eurípides Castro

Hace algún tiempo –dic /2014- escribí este articulo por invitación que me hiciera el abogado Fredy Omar Torné, para que plasmara mi idea de hacerle un homenaje a las personas que de una u otra forma, se destacaron en el devenir de Santa Lucía, nuestro pueblo natal Santa Lucía, es un bello enclave del departamento del Atlántico a orillas del Canal del Dique, que ha cumplido su mayoría de edad como municipio, sus resecas y asoleadas calles son testigos pícaras de su pujante historia.

Allí como todo asentamiento caribeño, se ha mantenido siempre la esperanza y una confianza impetuosa para cambiar el futuro aunque paradójicamente siempre el pueblo ha estado apegado a sus costumbres y tradiciones. Alguna vez el vacío ocupó el horizonte y no teníamos nada que mostrar. Ahora ese horizonte y varios lugares del mundo están llenos de personas paridas allí, que jalonan progreso, con la nostalgia porque no pueden olvidar sus raíces.

La historia no empieza, ahora, ni hace treinta años, la historia empieza cuando Santa Lucía era inhóspita, casi sin nombre y ni siquiera aparecía en el mapa; sin carreteras ni transporte. Era la época, cuando para llegar allí se necesitaba estar poseído de gran valor y de un sentido excéntrico de aventurero. A pesar de todo fueron llegando personas que se convirtieron en personajes. Que se sembraron allí y dejaron una indeleble huella. Me voy a referir solo a algunos de esos admirables personajes, porque son muchos más, pero el espacio del periódico es corto y no quisiera que se tomara como una grosera distracción el omitir en este artículo a alguno de esos héroes, nuestros héroes, a los que les debemos un gran homenaje, porque nos abrieron camino para andar con seguridad e identidad en cualquier lugar del mundo.

Entonces cabe aquí enseguida la pregunta ¿Por qué si tenemos héroes, el Colegio de Primaria de Santa Lucía, ese municipio olvidado de la historia y del presupuesto central, todavía tiene el nombre de Francisco de P. Santander?. A este señor se le ha hecho y con razón demasiados homenajes, por ser quien institucionalizó la educación en Colombia. 

Pero, nosotros ya tenemos también héroes de la talla del profesor Cesar Ospino Andrade, quien verdaderamente construyó escuela en Santa Lucía. Estamos en mora de brindarle un homenaje a ese valeroso hombre que llegó antes del medio siglo pasado al poblado y sentó sus raícesallí. Cuando en Santa Lucía no estaba siquiera instalada la energía eléctrica, ni acueducto, ni gas domiciliario, ni teléfono, ni internet, bibliotecas o comodidades para un citadino. Se quedó con nosotros hasta su muerte. Construyó su familia con una dama nacida aquí, tuvo sus hijos en un hogar respetable, y nunca más quiso irse del pueblo para poder enseñarnos lo que sabía.

Es claro, deviene que debemos cambiarle el nombre al Colegio de Primaria de Santa Lucía y colocarle el de Cesar Ospino Andrade, en honor a su memoria.

Así también por ejemplo la guardería del ICBF, deberíamos colocarle el nombre de la señorita Nieves Villa, a quien también le debemos nuestras primeras letras, ¿quien no estuvo en su escuelita y gozó con su bondad, lo mismo que con Belén Castro, a pesar de su fuerte carácter?.

A Manuel Ariza, a José Miguel Santana, a José María Polo Villa, a Juan Santana Caicedo, Alberto Polo Rivera, a Regulo Martinez Molinares, a Oswaldo Carrillo Perez, Campo Tapia,Norberto Medina, a Iván Polo Castro, a Ricardo Iriarte y a muchos más, les debemos un homenaje como hombres públicos que manejaron los destinos y finanzas del nuevo municipio.

Así como a Daudeth Cantillo Deal, por su legado de música, a su talento indiscutible, a la melodía de su Saxofón en la dirección de la “banda 20 de Julio” que traspasó la guardarraya de nuestras fronteras. Por ello el parque ubicado frente a la Iglesia, como es, debe llevar su nombre con letra de molde, es allí donde se desarrolla nuestro festival “Son de negro”, es más que obvio, tener en cuenta también el nombre de Merito Mendoza por su gran aporte a nuestra cultura. 

Sin discusión el honorable recinto del Concejo Municipal debe llevar el nombre de quien más veces ha sido elegido Concejal, se trata de Hernán Polo Villa. De idéntica forma la Casa Cural debe llevar el nombre de Oswaldo CarrilloPérez, quien fue su ejecutor cuando el presupuesto municipal era exiguo; la Casa Campesina debe llevar el nombre de Andrés Avelino Altamar o de Julio Jaramillo, luchadores por siempre de la causa de los pequeños campesinos; asimismo, el palacio Municipal debe llevar el nombre de uno de los mayores impulsores de la municipalidad: Regulo Martínez Molinares. 

La casa de la cultura en buena hora y ni quien se atreva a quitarle ese honor, lleva el nombre por siempre de Rafael Arturo Martínez Villa, y por lo menos uno de sus salones debe tener el nombre de “Toño” Pérez Herrera, un gran estudioso del foro cultural y folklórico del caribe; el hogar de la tercera edad debería llamarse “Conchita” Sanjuán Villacomo dama pionera del hospedaje y la hostelería en el Municipio; el Centro de Salud debe llevar el nombre del Dr.Manuel Julián Santana Caicedo, nuestro primer médico; la fundación por ti Santa lucía o el Club de leones debe denominarse Pedro Ariza D’al.  

Y hasta debemos pensar en cambiarle el nombre al Colegio de Bachillerato: Existen personas que sacrificaron bienestar en la ciudad por venirse a Santa Lucía, entre ellos varios profesores incluido el licenciado Jorge Carrillo, pero me refiero especialmente al Licenciado: Rafael Cuello Lorduy,quien fue su impulsor cuando solo existía ese colegio en el papel, él lo convirtió en realidad tangible y material. 

En fin, hay muchas más personalidades ilustres que pusieron su granito de arena para enriquecer con sus HECHOS este pedacito de sueños llamado Santa Lucía. Pero tengo el temor de dejar por fuera algún prestante nombre, por lo que me abstendré en este artículo de enlistarlos a todos, prometo que lo haré en otra ocasión que el Director de la revista“Hechos de Santa Lucía” Dr. FREDY TORNE me invite de nuevo a escribir y me facilite un espacio. 

Y sí, allí en los anaqueles de nuestros recuerdos, se encuentran regados en las distintas disciplinas del conocimiento personas que admiramos, lo mismo que sucede en el deporte del futbol donde descollaron nombres como Julio “el timba” Villa, el “chicho” Orozco Martinez, Juanchi, Sixto y Eduard Sanjuán, el Beri-Beri, EdinsonZubiandy, Tomás y Jose Vasquez, etc.

Habría que hacer un capítulo aparte a Casimirito Barragán y Ramón “la vaca sarda” Núñez, ingenieros empíricos, entre otros, estos últimos sin haber estado en la escuela de ingeniería de Harvard, movían, desde mediados del siglopasado, las edificaciones de un lado a otro con solo algunas palancas, mucho antes que en Bogotá movieran el Edificio de Avianca. 

Son estos y muchos héroes y personajes que han sido iconos en nuestra tierra y por tanto no merecen el olvido. Por ello nuestros edificios emblemáticos, salones, colegios, parques, calles, así como algunos callejones o carreras que enhorabuena algunos llevan el nombre de “Chiquita” Barragán, el de “tonita” Ahumada; o como el puerto de Rafael Pacheco, o el de Elisa Rico, o el de la niña Sola, o el de las Cano, etc, asimismo deben llevar todos, el nombre de uno de nuestros personajes, porque ellos nos mostraron el camino, fueron pioneros a pesar de no contar con las facilidades que tenemos ahora.

Es decir, apreciados lectores, como todos los pueblos del Caribe, también Santa Lucía tiene sus héroes. Por cuestiones de espacio, falta por nombrar muchas otras personalidades, en tanto he nombrado algunas que han sido pioneras de algo o se han destacado en algo y eso se debe valorar, porque el pasado fue tan fértil en lecciones que cualquier futuro debe ser mejor en su cosecha. Y la condición es que no se olvide ni se niegue, que la realidad empezó hace mucho rato, no fue hoy. 

Deviene apodíctico entonces que el futuro será esplendoroso y tendrá fuertes bases, siempre que las nuevas generaciones de Lucienses no se olviden de los pioneros que nos enseñaron que todo tiempo pasado fue mejor. En todo caso no puede haber futuro sin pasado.

EURIPIDES CASTRO S. euripidescastro@hotmail.com