A 90 días de gobierno, la administración Departamental y Distrital no arrancan
Por JAVIER DE LA HOZ LUNA
A 90 días de haber iniciado el nuevo período constitucional de los mandatarios regionales, en Colombia, los atlanticenses y barranquilleros están expectante de lo que podría ser el tercer mandato de Eduardo Verano en la Gobernación del Atlántico y Alejandro Char en la Alcaldía de Barranquilla. Hoy, la incertidumbre es la constantes en esta zona del país donde las administraciones no arrancan en firme y el mensaje que envían a diario es de iliquidez.
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Así se puede cotejar de los primeros actos administrativos tanto del Alcalde Alejandro Char y del Gobernador Eduardo Verano al presentar ante sus coadministradores Concejo de Barranquilla y Asamblea Departamental una solicitud de endeudamiento y cambios en el actual presupuesto para que les permita activarse administrativamente.
Char en su momento reconoció que la situación del Distrito no es la mejor. Caso contrario de Verano, quien ha sido cuestionado por la comunidad del Atlántico y hasta por los diputados del Atlántico- Isabella Pulgar Mota y Alfredo Varela- por anunciar la entrega de los recursos de la sobre Tasa de Seguridad Ciudadana, al Distrito de Barranquilla a pesar que el Departamento requiere de mayor acción en materia de seguridad.
Barranquilla y el Atlántico están en poder de los extorsionistas y requiere acciones inmediatas que permitan darle tranquilidad a todos, especialmente a los inversionistas para que sigan adelante tanto sus procesos comerciales e industriales en esta zona del país.
La Asamblea Departamental se mantiene en sesiones extras para estudiar 5 iniciativas presentadas por el Gobernador Verano relacionadas con el Plan de Desarrollo y lo concerniente a la consecución de los recursos para poner en marcha dicho plan.
Al día de hoy prácticamente las administraciones se encuentran paralizadas, a la espera de la aprobación de la Hoja de Ruta. Hay quienes dicen que son excusas de los mandatarios, como políticos que son, para ganar tiempo y mantener distraídos a los electores, quienes le apoyaron en las urnas durante las elecciones territoriales.
La realidad hoy es, la incertidumbre de los atlanticenses y barranquilleros que han sido testigos en los últimos 90 días de la poca gestión, del incremento de la delincuencia, el cierre de negocios, el beneficio para los amigos cercanos de ambos mandatarios; mientras tanto el pueblo que los eligió sigue esperando.
